La Tesorería General de la Seguridad Social, TGSS, regulará en noviembre de 2024 las cuotas del nuevo sistema de cotización para los trabajadores autónomos, en vigor desde el 1 de enero de 2023, que se basa en los rendimientos netos anuales obtenidos en el ejercicio de todas sus actividades económicas, empresariales o profesionales a lo largo del año pasado.
Dado que los rendimientos netos anuales reales quedan reflejados en el IRPF, los correspondientes a 2023 se han declarado con la Renta de 2023 en junio de este año. Ahora cuando la Tesorería General de Seguridad Social dispone de esos datos, puede determinar la cuantía de las cuotas y verificar si es correcta la base elegida por el profesional autónomo.
La Tesorería, por tanto, determinará los rendimientos netos mensuales computables para calcular la Base de cotización definitiva, por otra parte, comprobará si la Base de cotización elegida por la persona autónoma es correcta y se adecúa a los rendimientos netos finalmente obtenidos y, en caso necesario reclamará o abonará la diferencia.
Este proceso de regularización de cuotas tiene como objetivo establecer las cuotas y Base de cotización definitiva del autónomo/a para los próximos años. Existen unas tablas para determinar, dependiendo de los rendimientos de uno en 2023, el rango de cotización que le corresponde, es decir, fijan la base mínima y máxima de cotización.
En la página web de Hiru.org se pueden consultar la tabla y un par de ejemplos de rango erróneo. Los rendimientos y ganancias del autónomo se ordenan por tramos de unos 150 euros, cada uno desde un mínimo de 650 euros, y a cada tramo de rendimiento le corresponde una cotización orientativa mínima y máxima.
Si el transportista autónomo ha cotizado con una base que está dentro del tramo de rendimiento correspondiente, ha actuado correctamente, no tiene que hacer nada y esa cifra provisional se convertirá en la base de cotización definitiva.
Si la base de cotización está por debajo o por encima del tramo sobre su rendimiento ha cotizado más o menos y deberá corregir la base de cotización.
La norma permite al autónomo tener una cotización superior al que le corresponda si cumple dos condiciones o requisitos. Haber cotizado en el año de la regularización de cuotas por una Base de Cotización determinada en función de los rendimientos, superior a la que le corresponde según sus rendimientos netos mensuales, o en su caso, haber estado de alta el 31 de diciembre de 2022 con una Base superior a la que le corresponde según sus rendimientos netos mensuales.
En los próximos meses se procederá a la liquidación de las cotizaciones. Una vez determinadas las cuotas mensuales se sabrá si al autónomo le corresponde devolver parte de la cuota o ingresar la diferencia. Si el resultado de la regularización es a ingresar, el autónomo recibirá una resolución finalizada en “2”, (R 23 XX2), en la que se le indica el importe a ingresar. Y si al autónomo le toca pagar, recibirá una notificación con la resolución y tendrá de plazo hasta el último día del mes siguiente al de la notificación para hacer el ingreso con un justificante que se adjuntará a la hora de la notificación.