El Gobierno de Madrid ampliará la ayuda para aliviar el ascenso del precio del gasoil a las empresas deslocalizadas; bonificará durante los primeros seis meses de 2023 a los camiones de las empresas extranjeras que trabajan en las carreteras españolas. El sindicato Hiru considera que se trata de un proceder y conducta errónea, ya que se trata de las empresas que se aprovechan de la deslocalización o el traslado de su sede al extranjero para abaratar los precios del transporte, quebrar y arruinar al sector. La decisión de incluirlos en la bonificación aprobada por el Gobierno después de la huelga de marzo de 2022 que alcanza 20 céntimos por litro hasta marzo y 10 céntimos hasta junio favorece principalmente a las empresas buzón, que estos meses han estado reclamándolo. La ayuda se está articulando mediante el censo de transportistas que se benefician del gasóleo profesional y hasta ahora las empresas extranjeras no lo recibían, pero, ahora, el Gobierno ha decidido ampliar la misma y lo cobrarán con carácter retroactivo, decisión que no ha gustado al sector en general ni a los transportistas autónomos en particular.
Estos no entienden que se beneficie con dinero público a estas firmas extranjeras, conocidas en el sector como empresas buzón, principalmente radicadas en Polonia, Lituania, Portugal, Bulgaria y Rumanía, para reducir los costes laborales y fiscales, a pesar de que muchos pertenecen a empresarios españoles. Son camiones que no tienen ninguna actividad es esos países y trabajan permanentemente aquí. Todo ello dificulta la realidad del transportista autónomo que no puede trabajar a los precios reducidos mediante esas maniobras irregulares. Fenadismer ha denunciado que casi el 40% del transporte con origen o destino en el Estadso español es realizado por empresas extranjeras, “y con la nueva medida aprobada se verán incomprensiblemente beneficiadas con dinero público”.