Los transportistas autónomos vascos mostramos nuestra incredulidad ante el anuncio por parte de la Diputación foral de que no va a atender las reclamaciones sobre los peajes cobrados irregularmente por la Diputación en las carreteras A15 y N1 como es sabido mediante unas normas que fueron anuladas posteriormente por los tribunales.
Del afán recaudatorio que se evidenció cuando se implantaron los peajes a los camiones en las carreteras guipuzcoanas, se ha pasado al afán confiscatorio de quedarse con el dinero que no les corresponde.
A los transportistas autónomos nos parece una irresponsabilidad que se salten las sentencias judiciales. Creemos que debían haber devuelto las cantidades cobradas irregularmente desde principios de 2018 y que la devolución se realizara de oficio a todos los transportistas afectados, ya que les cobraron automáticamente cada vez que pasaban por los arcos dispuestos para tal efecto y tienen todos los datos. Se negaron a la devolución automática diciendo que sólo atenderían a las reclamaciones realizadas individualmente y ahora ya están diciendo que tampoco las atenderán, lo que obligará a los transportistas a iniciar un proceso en los tribunales.
En total los transportistas de Hiru han presentado desde noviembre 123 reclamaciones, por un importe total que rondan los 600.000 €, en Sede Electrónica de Diputación dentro del plazo de un año posterior a que se dictara la sentencia que anulaba el peaje. Están diciendo que todas las reclamaciones han sido desestimadas. Ninguno de los afectados del sindicato Hiru ha recibido respuesta alguna de momento a su reclamación.
Hiru critica, asimismo, el elevado coste que está provocando, el incumplimiento reiterado, actitud irresponsable y mala gestión de los responsables de Bidegi y de la Diputación, que, en definitiva, recae en la ciudadanía de Gipuzkoa que pagará las consecuencias del desaguisado que comenzó en enero del 2018: inversiones realizadas en los arcos inhabilitados, los gastos del personal contratado, los costes de todos los procesos judiciales, las devoluciones de los cobros irregulares, posibles sanciones o recargos, etc.
Hiru ha pedido reiteradamente que la diputación renuncie definitivamente a la recaudación de fondos mediante sistemas de peajes a camiones. Las carreteras son bienes públicos y los transportistas realizan un trabajo esencial para la sociedad y las empresas. Por lo tanto se deberían financiar con el dinero de todos. Sin embargo, la Diputación de Gipuzkoa pretende volver a cobrarlo dentro de unos meses y en todos los tramos de las citadas carreteras. Además de ignorar las sentencias judiciales, están jugando con el dinero público y castigando a los transportistas que realizan un servicio publico “esencial”.
Los transportistas del sindicato Hiru seguirán exigiendo la devolución automática y ante las negativas de la administración presentado recursos en los tribunales.
